La evaluación pedagógica, evalúa constantemente el proceso de aprendizaje de cada individuo por medio de diversas actividades, trabajos en grupo, participaciones y evaluaciones orales, y escritas, tareas y trabajos de consulta, participación y actitud en clase y los temidos exámenes, y ese avance académico se ve reflejado en una valoración, ya sea numérica o alfanumérica que refleja un nivel de alcance de logros o indicadores de logros; pero solo reflejan eso, que tanto el joven ha alcanzado esa meta, objetivo o como lo quiera llamar; por esta razón La nota no es acumulativa, es un indicador que promueve un cambio y si ese cambio se da durante el periodo o durante el transcurso del año lectivo al final de año las “notas negativas” o valoraciones que indicaban que faltaba algo y ya fueron superadas no deberán influir en ese indicador final pues esas falencias ya se superaron.
Esta manera de pensar la evaluación pedagógica, requiere de un esfuerzo del docente físico y mental, enfocándose es en la adquisición y superación de esos logros, no destacando las falencias sino resarciendo las fortaleces ofreciendo las debidas oportunidades para que el joven (estudiante) pueda superar sus debilidades.
2,5 más 2.0 más 2.0 más 3.0 es mucho más que 4 notas de 4 periodos. Es un acumulado de esfuerzos y actividades.
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